El romero es una planta originaria del Mediterráneo pero actualmente crece en muchas zonas de Europa, Norte de África, Oriente medio y California. Su nombre viene del latín Rosmarinus que significa Rosa del Mar. En el antiguo Egipto se quemaban las ramas con incienso y se colocaban sobre los cuerpos de los faraones difuntos para ayudarles a buscar una nueva vida mejor. Los griegos dedicaban al romero a Apolo, dios del sol, de la medicina, la música, la poesía y las profecías. Para los romanos era sagrado y se le consideraba un símbolo de lealtad, de conocimiento de la muerte, de recuerdo y de la inteligencia. Era también un símbolo del amor y de la amistad. Se consideraba que el romero daba el poder de concentración, activaba la memoria y favorecía el recuerdo.

El romero es una planta que trae buena suerte y que protege frente a las energías negativas. El romero es un símbolo del amor y de la amistad, se consideraba que daba el poder de la concentración, activaba la memoria y favorecía el recuerdo. Trae buena suerte y protege frente a las energías negativas.

Nuestro Aceite Esencial de Romero o Rosmarinus officinalis leaf oil, se obtiene destilando las hojas y las sumidades florales, y contiene propiedades beneficiosas para el cuerpo y la mente.

Entre sus propiedades y beneficios destacan:

A Nivel Cosmético: el Aceite Esencial de Romero es astringente, tónico vitalizante, estimula la microcirculación, favorece el crecimiento del pelo y la regeneración. Además ayuda a mejorar el estado de las varices y las arañas vasculares; es un reparador de tejidos y oxigenador.

A Nivel Terapéutico: es un aceite esencial carminativo, digestivo, diurético, emenagogo, hepático, hipertensor, rubefaciente, estimulante y sudorífero. Es un estimulante del sistema circulatorio y un tónico energético general.

A Nivel Psicológico: el Aceite Esencial de Romero es un estimulante de la energía vital, afrodisíaco masculino. El romero fomenta la gratitud y mejora la actitud frente a los detalles de la vida, conecta con la energía solar y es ideal para las personas desvinculadas con la naturaleza. Aporta optimismo y ayuda a ver el vaso medio lleno y no medio vacío.